“Non
nobis, Domine, Non nobis sed Nomini tuo da gloriam”
Lema templario
Varios siglos ya han transcurrido desde la desaparición de la Orden del Temple original, de ese grupo de personas que
orientaban sus vidas de acuerdo al ideal caballeresco. Aquel que ponía su fuerza
al servicio del bien, donde el héroe era el protector de los débiles y oprimidos.
Sin embargo, a pesar de las centurias pasadas y de inexistencia física de la
Orden primigenia esta se encuentra viva y emerge con fuerza en cada muchacho de la tropa Cruz del Sur que
toma para sí los ideales que ésta hizo suyos.
En nosotros, la T.C.S.,
ha renacido su cuerpo espiritual. En nosotros han vuelto a hacerse presentes aquellos valores que formaban la quintaesencia
del Temple: lealtad, honor, pureza, humildad, protección a los más débiles, la
fe en Dios.
